Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
26 de octubre, 2009
Está tan enredado eso del paquete fiscal que al final de cuentas nos va ir como a la novia aquella que pedía consejo de cómo vestirse la noche de bodas. “Mira hija, le dijo su madre, te pongas la ropa que te pongas de cualquier forma vas a caminar, así que por eso ni te mortifiques”. La diferencia con los mexicas es que no sabemos ni por donde nos van a llegar en el entendido de que los políticos son especialistas en crear laberintos de los que a veces ni ellos pueden salir. Ya ve como andan, más divididos que cualquier familia por la herencia, y conste que el parecido es mera coincidencia. De manera que todo este reverendo desmother confirma la descomposición de un sistema que entró en su última y más nauseabunda etapa. Como consecuencia arrastra generaciones de inocentes que habiendo tantos mundos y tantas vidas aquí vinieron a coincidir. ¡Ah, chingá!. El asunto que en manos de esta clase de políticos el país no tiene remedio, sin embargo hay una o muchas esperanzas cuando en estas crisis surgen líderes que en veces no podrán ser los más capaces, pero sí los más carismáticos y sobre todo los más auténticos y naturalitos. La aparición de “Juanito” no es de risa, sino de reflexión porque con todo y lo limitado que pueda ser, la gente le entregó su confianza pa’ gobernar uno de los espacios más conflictivos de la capital. Y no es juego porque pa’ gobernar y sobrevivir entre puro animal de uña, hay que ingarse. El caso de López Obrador es diferente aun con ciertas semejanzas. Fue un proyecto “reventado” en el primer intento por los mismos que ahora traen de cabeza a la nación. De haberse concretado no afrontaríamos los problemas conocidos, aunque sin duda habrá una segunda, tercera o quién sabe cuántas oportunidades, como las han tenido otros gobernantes de Latinoamérica, y el boliviano Evo Morales o el brasileiro Lula no dejarán mentir. Es cuestión de resistencia y “el peje” lleva cuatro años soportando las embestidas de sus adversarios, algunos de los cuales se localizan hasta en el PRD. ¿Estás oyendo Chucho Ortega y misérrimos que te acompañan?. De suerte que en todo este enredo fiscal, quede como quede,“los paganos” seremos los de siempre. Y es que los contribuyentes no entendemos hasta donde el aumento a los combustibles, del IVA o el ISR pueden beneficiar a la macroeconomía y de paso “salvar” a México, pero sí sabemos que a la mesa llegarán menos alimentos, que las deudas crecerán y el empleo disminuirá por los mismos motivos. Ahora los dipus y senadores están encerrados con los líderes de sus partidos y quien sabe que jijos de la tiznada estarán tramando pa’ encubrir su reputa-ción y proteger la ganancia en pesos contantes y sonantes. Si usted cree que estos tales por cuales están “trabajando” por salvar la economía popular, más vale que aprenda a rezar y busque la forma de ponerse bien con Dios y los santos apóstoles porque solo un milagro nos sacará del problemón en que nos metieron estos hijos de Lucifer. El sábado vence el plazo pa’ aprobar el presupuesto y a como van las cosas no quedará más remedio que aflojar el cuerpo. Digo, p’a que le hacemos al tío Lolo si estamos en sus manos. SUCEDE QUE Pedrito Reyes,- un abrazo amigo-, es un político muy realista. Cada que se acerca el fin de una administración en lugar de saludar con los “buenos días” dice “menos días”, nomás pa’ irse acostumbrando a lo que viene… Ah, raza. Y hasta la próxima.