Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
9 de agosto, 2016
• El gran privilegio de vivir en esta región
• Enfasis de CDV en relación con Texas
El estado de Tamaulipas, como muchos otros estados fronterizos, sobre todo los que tienen gran extensión, se dividen en áreas que se encuentran muy definidas por la forma muy particular de las comunidades que en ellas habitan pero, también, por la actividad específica a la que se dedican.
Los gobiernos de cada una de esas entidades o, mejor dicho, los gobernadores de cada una de las entidades, no siempre tienen o quieren dedicar el mejor de sus esfuerzos a desarrollar al máximo cada una de las regiones y, así, en ocasiones, el progreso no llega a cada una de ellas con la intensidad que las cambiantes condiciones económicas y sociales lo demandan.
Todo indica que la nueva administración estatal que encabezará el gobernador electo Francisco García Cabeza de Vaca tendrá una óptica distinta con respecto a la frontera.
De las contadas apariciones públicas que ha tenido Cabeza de Vaca en las últimas semanas cuatro han sido en la frontera, precisamente en el lado texano y, si bien al ser abordado por los medios informativos al salir del palacio de gobierno de Cd. Victoria el lunes para entrevistarse con el gobernador saliente Egidio Torre Cantú, expresó que por ahora no haría declaraciones sobre aspectos relacionados con su gobierno y esperaría a tomar posesión del cargo para el que fue electo, ya con mucha anticipación, en la ciudad de Mission, hace unas semanas, ante los directivos de Index Reynosa, organismo que agrupa a las plantas maquiladoras, señaló que la Secretaría de Desarrollo Económico de su gobierno tendría su sede en Reynosa y la de Turismo (¿secretaría, subsecretaría o dirección?) centralizaría su actividad en Tampico.
Desde ahora podemos augurar que la frontera tendrá un tratamiento diferente para impulsar su economía y desarrollo al que se le ha brindado, de lo contrario no tendría absolutamente ningún sentido desplazar a la secretaría del ramo hasta la región norte estatal por meras razones geográficas.
Pero por muchos motivos, la frontera requiere no solamente ser atendida adecuadamente, sino que esa función deben realizarla expertos y conocedores de la problemática y beneficios que se derivan de esta importante región.
En ocasiones las autoridades y organismos de diversa índole tamaulipecos parecen ignorar el gran privilegio que representa el ser vecino en un área de varios cientos de kilómetros del país más poderoso del mundo y del estado, Texas, que cuenta quizá con la economía más próspera de la Unión Americana.
Pero no es sólo la parte económica. Estados Unidos cuenta con extraordinarios recursos tecnológicos y de capacitación que se encuentran a la mano para quienes quieran y puedan tener la oportunidad de aprovecharlos.
No en balde, una de las propuestas del gobernador electo en campaña fue la de ofrecer entrenar a los policías de Tamaulipas precisamente en los Estados Unidos.
Las fronteras, refiriéndose a la de ambos países, cuentan respectivamente con incentivos y recursos que no podrían ser factibles en otras regiones por parte de gobiernos de México y Estados Unidos pero, también por parte de instituciones especializadas bancarias como el Banco de Desarrollo de América del Norte, que brinda financiamiento, en ocasiones a fondo perdido o no reembolsable, para proyectos que beneficien el medio ambiente en una franja fronteriza delimitada.
Pero esto no solamente se puede ver como un beneficio para Tamaulipas u otros estados norteños mexicanos; hay una serie de bondades para el comercio, el turismo y la economía de las fronteras del sur de Estados Unidos, particularmente de Texas.
Y si se piensa que las amenazas de construir muros van a frenar esta situación especial fronteriza, nada mejor que recordar las palabras de Carlos Cascos, secretario de estado de Texas, por cierto nacido en Matamoros, quien durante su reciente visita para participar en un foro binacional en la ciudad de McAllen afirmó que independientemente de quién gane las elecciones en noviembre próximo en Estados Unidos, Texas y México seguirán haciendo negocios y manteniendo una estrecha relación.