Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
2 de mayo, 2016
Los debates que se han ofrecido a la ciudadanía en Tamaulipas por parte de los aspirantes a gobernador del estado nos han vuelto a muchos una especie de “debatológos”.
Más allá del contenido del primero de ellos del sábado 23 de abril y de lo que se espera del que sostendrán este miércoles cuatro de mayo, la realización del ejercicio de lo que debe ser una confrontación de ideas nos ha hecho reflexionar seriamente si se está realmente aprovechando la enorme oportunidad que se brinda a los contendientes políticos, siendo generosos en la apreciación, porque hemos escuchado que se ha calificado como inútil el debate anterior y citamos como referente la discusión dentro del programa “Reporteros en la mesa”, donde los panelistas Alberto Guerra, Heriberto Deándar Robinson, Martha Isabel Alvarado, Luis Alonso Vázquez y quien esto escribe, nos enfrascamos en una discusión, amistosa pero discrepante, en cuanto a la calidad del diálogo, si se le puede llamar así, que se dio en el debate en mención.
En esa ocasión los temas de Seguridad y Desarrollo Social se convirtieron en una serie de descalificaciones y ataques sin respetar la temática ni los tiempos de la misma y poco se hizo por profundizar en los conceptos de los participantes sobre aspectos que no solamente son de gran interés para la población tamaulipeca, sino que permiten darnos una idea del perfil y formación de cada uno de los aspirantes a gobernar el estado.
Para el próximo los tres temas son: Gobernabilidad, Corrupción y Desarrollo Económico.
Gran oportunidad para que se luzcan… los que tengan con qué hacerlo. La capacidad y formación personal no se improvisa.
Si bien sería deplorable que se ofreciera un repertorio de descalificaciones y ataques sin fundamento buscando la notoriedad y golpes de espectacularidad, no debe excluirse el señalamiento documentado ofrecido en su justa dimensión.
Independientemente de quién resulte electo, a estas alturas es muy evidente que el bando o bandos perdedores darán una férrea contienda postelectoral por lo que los conceptos de la gobernabilidad que expresen ahora los integrantes del próximo debate irán dando una idea de la forma en que van a poder coordinar acciones, no solamente con la estructura estatal sino con organizaciones privadas y públicas que interactúan en la sociedad tamaulipeca.
Se vive en un estado donde las instituciones parece imposibilitadas para llevar a cabo su función con honestidad, carcomidas por la corrupción y, lo peor, la impunidad y la complicidad con los delincuentes, por lo que el tema de la Corrupción y su combate decidido tiene que ser, no sólo materia de discusión a nivel de debate, sino acción firme y continuada para lograr sanear instituciones de todos los niveles y de las más diferentes funciones.
Tamaulipas disfruta de extraordinarios recursos naturales, infraestructura e inversión activa. Desde yacimientos de hidrocarburos y una rica costa en el Golfo de México, hasta la industria establecida en toda la entidad, pasando por una gran vocación comercial de los tamaulipecos que, junto con la proximidad e intercambios con los Estados Unidos en una dinámica frontera, dan infinidad de recursos económicos que requieren de administración y desarrollo.
El tiempo del debate hace realmente muy limitada la participación de los ocho contendientes, que ya confirmaron su asistencia, por lo que es de esperarse que sepan obtener provecho para demostrar que pueden, en un momento dado ser depositarios de la titularidad del Gobierno de Tamaulipas.
Los tamaulipecos merecen una discusión seria, respetuosa y a profundidad. Es lo menos que puede darse en retribución a los grandes recursos que se les brindan para hacer sus campañas que, no hay que olvidarlo, son recursos públicos que merecen un buen destino.