Un “peje” clandestino

Max Avila

10 de junio, 2009

El escribidor no se cansa de repetir que en Tamaulipas los partidos de Izquierda son botín aprovechado solo por unos cuantos, a eso se debe en gran medida su debilidad. A ello agregue la costumbre de permanecer en constante riña en razón de ambiciones que no trascienden más allá de cofradías ocultas bajo el velo misterioso de la complicidad…todo sea por los alcanzar beneficios prontos y expeditos que garanticen el libre tránsito por los impredecibles caminos de esta modalidad de democracia, solo concebida en nuestro estado. El asunto es que por estos rumbos la Izquierda no avanza, de ahí que durante su fugaz visita a la capital del estado “el peje” apareció decepcionado y sin más ánimo de cumplir a la brevedad una estancia de mero trámite, donde solo se reunió con algunos dirigentes en un evento en el cual se satanizó a los medios de comunicación con lo que, y usted ha de disculpar, la sospecha se incrementa. No es la primera vez que a AMLO lo aíslan de periodistas cual si temieran una proclama que cimbrara al país, cual si creyeran que desde ciudad Victoria el Presidente Legítimo ha de ratificar el rompimiento con las instituciones provocando el alzamiento popular contra las mismas…¡al diablo con las instituciones!, como el grito alterno de aquel cuyo cabalgar cada vez es más lento y dificultoso. Como simple referencia recordéis al viejo Carranza acorralado por los traidores en una choza de Tlaxcalantongo Puebla, abandonado por sus amigos y recibiendo una lluvia de balas en aquella obscura y terrible noche de tormenta. Mera referencia digo, que en mucho se acerca a la realidad que rodea a “el peje”…¿dónde están Manuel Camacho Solis y Porfirio Muñoz Ledo?, acaso buscando las alianzas más idóneas pa’ seguir siendo íconos de la moderna política con ideal parlamentario. Muñoz Ledo es quien se engalla rechazando el voto blanco suponiendo que en su caso los mexicanos tenemos suficientes razones para entregarle una confianza que reclama con la vehemencia de un político desempleado, pero sin la garantía de retornarla corregida y aumentada al remitente. El PRD del 2006 ya no es el mismo. Ahora la mezquindad de Jesús Ortega es tanta que no tiene escrúpulos para utilizar a niños en una propaganda diabólica y mercenaria creyendo que la inocencia puede encubrir su entreguismo al gobierno panista y el repugnante tufo de la traición que lo marcó para siempre. No extraña entonces que los falsos perredistas es decir, “chuchos”, “amalios” y lo que resta del “cuauhtemismo” bloqueen a AMLO en Tamaulipas, reduciendo su presencia a una visita de cortesía sin opción siquiera a entrevistarse con los medios. Mientras tanto los partidarios del voto anulado se multiplican en razón geométrica al convencimiento de que al definir el sufragio solo se alimenta la corrupción e irresponsabilidad de los políticos y sus partidos. Quienes sienten miedo por esta nueva manifestación democrática deben recordar que la desconfianza popular es irreversible…y ni modo que falten motivos pa’ que la raza odie a los políticos. SUCEDE QUE Olvidado el tema de los debates entre candidatos a dipus, no hay duda que a estas alturas del juego el mejor librado ha sido Rodolfo Torre Cantú, con el agregado de que los foros resultaron de tan grata convocatoria que ya Gamundi piensa ampliar el temario…y a lo mejor lo hace, ya ve como es. Hasta lueguito