Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
4 de diciembre, 2010
A poco más de un año de que autoridades municipales desalojaron a familias del -entonces- sector irregular Mano con Mano, personas inconformes se manifestaron, este viernes, frente a Palacio Municipal para exigir sean reubicados de nueva cuenta en dicho predio, adelantando que ya existe una denuncia formal en contra del alcalde Oscar Pérez Inguanzo y autoridades estatales por abuso de autoridad y lesiones, por mencionar algunas.
Con el apoyo de integrantes de la Otra Campaña (EZLN) las familias se apostaron con pancartas repudiando la acción de aquel 24 de Septiembre del 2009, cuando con lujo de violencia fueron desalojadas por elementos de la Policía Metropolitana, con la venia del alcalde y de autoridades de la Secretaría General de Gobierno.
Y es que unas 200 familias que habitaron el predio irregular exigen les sean restituidos sus “derechos” creados por más de 10 años en ese lugar:
“Ya nos hemos cansado de las promesas del alcalde, de la demagogia de su Secretario del Ayuntamiento, tenemos meses dialogando con ellos pero ellos son los que no han querido resolver el problema que ya tiene más de un año tres meses, solo nos dan largas”, dijeron.
Crispín Pacheco Hernández, representante de los quejosos, sostuvo que desde el pasado 19 de noviembre quedó asentada en la Procuraduría General de la República (PGR) la denuncia penal en contra de la primera autoridad porteña “por privación ilegal de la libertad, robo, extorsión, amenazas, lesiones graves, allanamiento de morada, abuso de autoridad, asociación delictuosa, manipulación de documentos y usurpaciones de funciones".
"Esto es por causa del desalojo, vamos a seguir insistiendo con estas manifestaciones hasta que haya una solución”, expresó.
Recordó, que ese día dichas familias perdieron todo en el desalojo violento “pues era el único patrimonio con que contaban desde hace mas de 10 años y de la noche a la mañana lo perdieron todo”.
Pacheco Hernández, recalcó que ya tuvieron acercamiento informal con la presidenta municipal electa Magdalena Peraza Guerra, para tenerla al tanto de los pormenores de la situación “sabemos que por el momento no puede hacer nada, pero espero que se reconozca el error que cometieron en ese desalojo y en la medida de sus posibilidades puedan resarcir el daño cometido”.
Dichas personas se instalaron en la Plaza de Armas y permanecieron ahí por espacio de varias horas.