Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
18 de abril, 2010
Desde hace varias semanas, los tres primeros lugares de la lista de regidores del PRD están definidos y asignados para Sergio Martínez, Esthela Chavira y Félix Canales. Esos tres fueron los nombres que se registraron ante la dirigencia del partido. Son los tres nombres que se presentaron ante Jesús Ortega, cuando éste vino a Nuevo Laredo. La lista fue avalada y palomeada por el propio candidato, Salvador Rosas, a quien el partido exclusivamente le pidió el primer lugar y lo dejo en libertad para que buscase y decidiera el resto de los candidatos a regidores y síndicos. Aunque se han presentado voces pidiendo modificar el orden, ni Salvador Rosas ha accedido ni tampoco la dirigencia nacional que insiste en que ya hay una planilla registrada y no habrá reversa. En medio de todo esto, si ya no se va a modificar el orden de la planilla, los perredistas se preguntan que le está ofreciendo Salvador Rosas a Hugo Galindo a cambio de que este lo apoye en la campaña, sin renunciar a su militancia en el PAN. Y es que dicen los que saben, o creen saber, que Hugo Galindo esta tan molesto con Glafiro Salinas y todo lo que paso en la elección del 2007, que está dispuesto a darle la contra, con tal de fastidiarlo. Desde el 2007, Glafiro y Hugo pintaron su raya, cuando ambos buscaban la candidatura a la alcaldía y la designación recayó en el segundo. Tras el destape, Glafiro dijo que se disciplinaba y apoyaba a Hugo, pero éste, al presentar a su planilla, dijo que Glafiro no tenía cabida en su proyecto. Después vino la elección en la que se dio el curioso caso de que la candidata a diputada local, Ileana Medina, obtuvo más votos que el candidato a la alcaldía, lo que obviamente enardeció a Hugo, máxime que en plena campaña se detectaron correos electrónicos donde se le pedía a los panistas dar un voto cruzado para Ileana en la diputación y para el PRI en la alcaldía. Desde entonces, Hugo Galindo está convencido de que lo traicionaron y por supuesto que lo traicionaron. Y entre esos traidores, él ubica a Glafiro y a otros más, aunque nosotros más bien creemos que los autores intelectuales fueron dos siniestros ex regidores a los que les gusta presumir que son honrados y campeones de la democracia, cuando en realidad son todo lo contrario. Y es que los pillos así son siempre: les gusta presumir de lo que carecen. Lo cierto es que últimamente se ha visto juntos a Salvador Rosas y Hugo Galindo, en más de una ocasión, y aparentemente se está cocinando algo para que finalmente el segundo apoye la campaña del PRD, sin irse del PAN. En otro tema, la creciente del río Bravo que se presentó el fin de semana, nos recuerda que desde hace algunos años se viene cocinando el proyecto de construcción de una presa a la altura de Colombia, Nuevo León, que tendría un costo de 250 millones de pesos. Con esta presa, las crecientes del río dejarían de ser un problema y por el contrario servirían para controlar el volumen de la presa. Uno de los arquitectos que trabajan en el diseño de la presa es Héctor Peña Saldaña, quien antes de ser incursionar en política tenía muchísimo éxito como arquitecto y constructor, pero hoy es más conocido por su participación en campañas electorales.