Catita

Raúl HERNANDEZ

16 de marzo, 2010

El domingo 14, Rodolfo Torre Cantú fue ungido candidato del PRI al Gobierno de Tamaulipas, ante la presencia de 2 mil 259 delegados, que se desplazaron desde los 43 municipios de la entidad. Desde Nuevo Laredo se traslado una nutrida caravana de priístas, integrada por cuatro autobuses, decenas que viajaron en vehículos particulares y algunos pocos que se desplazaron en aviones rentados o propios. Ahí también estuvo la señora Catalina Ibarra, mejor conocida como Catita. No entró al recinto pues no era delegada y tuvo que quedarse afuera, pero eso no impidió que la esposa de Rodolfo Torre, la señora Laura Graciela de la Garza Montoto, fuese a saludarla y a recordar que meses atrás la vio en otro evento en apoyo de su esposo. También la vio el Gobernador Eugenio Hernández y desde lejecitos le envió un saludo. Y es que Catita llegó a la convención del PRI vistiendo un jorongo al que le colocó el logo del PRI, con lentejuelas le grabó el nombre de Nuevo Laredo y llevó una decena de matracas que costeo de su bolsa, pues para ella no hubo ninguna clase de viáticos, ni siquiera para comer un taco durante el camino. Pero aunque no le dieron viáticos, las mujeres y hombres que la acompañaron llevaron tacos, fritos, lonches, refrescos y agua embotellada que compartieron como una familia, y además como una familia que se quiere. No dejaron de gritar porras, de sonar las matracas y de bailar, durante varias horas, porque a eso fueron: a divertirse y hacer ruido y de paso confirmar que tienen la camiseta bien puesta., aunque algunos no se lo reconozcan. Catita es una de muchas militantes del PRI que en cada proceso electoral hace su tarea para fortalecer al partido, sin esperar ni recibir recompensa. En otro tema, los precandidatos del PRI, Benjamín Galván, Rosa María Alvarado y Héctor Canales, les ofrecieron una cena a los reporteros de la fuente política la noche del lunes. Los dos últimos llegaron al lugar de la reunión con regalitos que rifaron entre los presentes. Rosa María y Héctor hoy se estarán registrando como pre-candidatos a las diputaciones por los distritos III y I, respectivamente. Al distrito de Rosa María ya se le conoce como el “Distrito de la Muerte”, con eso de que comprende colonias como la Madero y el Infonavit, donde el PRI suele perder casillas o las gana muy apretadamente. Por cierto que el coordinador de la campaña de Rosa María será Julián Serratos y el de Héctor, Martín Guerrero. El que también convivió con los reporteros, y por partida doble, es el precandidato del PRD a la presidencia municipal, Salvador Rosas Quintanilla, quien ayer mismo invito primero a un desayuno y más tarde a una carne asada. Rosas pregunto a los reporteros si llevaba la carne ya preparada o alguien se quería encargar de eso y por unanimidad se escogió a Pedro Natividad y a Gabriel Valverde para que se encargaran de asarla. En ambos eventos, Rosas fue arropado por Francisco Chavira contra el cual Víctor Martell ha desenterrado el hacha de guerra, molesto porque quiere imponer como candidata a regidora, en el segundo lugar de la planilla, a una de sus hermanas. El exdirigente ha anunciado acciones de protesta que van a iniciar con un plantón para oponerse a este registro.