Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
25 de mayo, 2009
* Golpear en la herida, acción deliberada. * Carece el PAN de estructura partidista. Parece clara la estrategia mediática montada por el gobierno de FELIPE CALDERON buscando echarle leña a la vieja guerra fraticida entre salinistas y zedillistas, labastidianos y madracistas, colisión que fracturó al PRI en los sucesivos comicios presidenciales de los años 2000 y 2006. El objetivo albiceleste es claro, debilitar por dentro, siguiendo la vieja máxima de dividir para vencer, aunque no todos conozcan la historia de JULIO CESAR. En la práctica así es. Hay mucho ruido extraño en la prensa nacional. Revelaciones periodísticas del más diverso calibre atizan la hoguera del divisionismo tricolor en la víspera de una elección intermedia. A nadie debe extrañar. Material les sobra. Nada tienen que inventar ni hacer acopio de fantasías, les basta recordar, hurgar en archivos, de texto y de imagen. Desde luego, contribuyó a dicha fractura la incapacidad que en su momento mostraron FRANCISCO LABASTIDA (2000) y ROBERTO MADRAZO (2006) para emprender alguna especie de “operación cicatriz” medianamente satisfactoria. Tal vez no pudieron o, peor aún, no quisieron ni tuvieron los ánimos. En el pecado llevarían la penitencia. HABITOS Y DEBITOS COMO ALFIL entre ambas corrientes asoma la figura de ELBA ESTHER GORDILLO, arroz de todos los moles, regenteadora de un ejército electoral que opera a conveniencia, como recomendaría el viejo FOUCHÉ, según convenga y “soplen los vientos”. Al mejor postor. Si el señor LABASTIDA en 2000 nada quiso saber de los madracistas, después MADRAZO en 2006 pagaría con moneda equivalente y muy poco haría por contentar a los herederos del labastidismo, el grupo TUCOM y derivados. Desdén con desdén se paga, aunque a la postre la actitud facciosa de tirios y troyanos (priístas todos) abonaría el camino de VICENTE FOX y FELIPE CALDERON. En ambos procesos electorales el PRI compitió (en el mejor de los casos) con medio cuerpo paralizado o quizás (peor aún) con la mitad de sus activos empujando en la dirección contraria, es decir, trabajando para el adversario panista en aras de algún pretendido realismo político. De aquí partiría el dicho de que FELIPE CALDERON tiene hoy una deuda con el PRI, como bien lo expresan, entre otros, MANLIO FABIO BELTRONES y EMILIO GAMBOA PATRON. En efecto, hay un débito importante con el sector antisalinista del tricolor que (1) rechazó a LOPEZ OBRADOR, (2) jamás se identificó con MADRAZO y (3) pactó le llegada de FELIPE, en calidad del “mal menor”. Eso lo saben los operadores del Presidente CALDERON, hoy que el PRI (pese a sus dos derrotas consecutivas) sigue conservando intacta su estructura nacional y el control de la mayor parte de las gubernaturas. Similar estrategia (aunque de menor envergadura) es la que se está operando en las organizaciones de izquierda. Quiérase que no, el penoso “affaire” entre AMALIA GARCIA y RICARDO MONREAL despide un insoslayable tufo electorero. Y aunque MONREAL haya migrado al PT, las diatribas entre ambos grupos políticos alcanzan al Sol Azteca. Al igual que en la reyerta interpriísta, la presente guerra zacatecana tiene por beneficiario al Partido Acción Nacional. O al menos eso quieren, intentan, pretenden… LA ANGUSTIA PRIMARIA NECESARIO es decir que dos administraciones presidenciales no le han dado al PAN una estructura nacional. Su elitismo los ha privado hasta ahora de una cobertura geográfica estable. Los focos de azul intenso (Guanajuato, Jalisco) palidecen (o incluso desaparecen) más allá de los bastiones tradicionales. De aquí parte el pavor que el calderonismo le tiene al Partido Revolucionario Institucional en las presentes elecciones intermedias. Ocurre que al no haber candidato presidencial, los resultados se fraguan, precisamente, en la fuerza, la madurez y la eficacia de las respectivas estructuras partidistas. Virtud de la cuál el panismo adolece. Por ello la apuesta del PAN se concentra ahora en el fomento intensivo de la fractura tricolor y, de paso, en el fomento del divisionismo lopezobradorista. Digamos que en ello Acción Nacional reconoce la principal de sus debilidades que mucho les avergüenza (y, desde luego, jamás lo admitirían en público) pues contradice en buena medida su nombre de pila. El PAN, duélale a quien le duela, no es un partido nacional. Su mapa de preferencias (militantes, adherentes y demás) observa huecos gigantescos en todo el mapa republicano, donde la presencia albiazul es apenas simbólica o incluso nula. Desde luego, ningún miembro, candidato o dirigente de dicho partido lo va a reconocer, pero los estrategas de FELIPE si lo saben y están obrando en consecuencia. Esta es la explicación de esa intensa guerra subterránea que hoy se encuentra en marcha para vulnerar a sus adversarios del PRI y el PRD. Sencillamente, a falta de estructura propia le apuestan a la fractura ajena. Póngale usted el nombre de su preferencia. Operación misil, torpedo, labor de zapa, quintacolumna o como usted quiera. Y, bueno, en la hora de las telenovelas y los pleitos de vecindario, la TV privada es la gran celestina. Si lo que se trata es de hurgar entre los basureros, para eso están los profetas mediáticos. Vendrán nuevos videoescándalos, más chismes de vecindario, seguramente, no pocos de ellos basados en hechos reales. Pero la mano que mueve la cuna es la misma. Y el beneficiario también. BUZON: vivatamaulipas@prodigy.net.mx WEB: http://vivatamaulipas.blogspot.com