Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
18 de enero, 2010
Sabedores de que han perdido un tiempo precioso, los panistas tamaulipecos se aprestan a recuperar algo, lo que se pueda, de ese lapso, de esos días y semanas que bien hubieran aprovechado y que ya se les fue. Si, porque si el PAN hubiera escogido el camino del “madruguete” y ya para estas fechas tuviera definida su candidatura al gobierno del estado, le habría tomado una ventaja política importante a su principal enemigo. Pero prefirieron esperar. Querían ver la carta del rival para adecuarse al tamaño del contrincante. Más sin embargo, parece que ya se dieron cuenta que no es por ahí el camino, y se adelantarán, finalmente, a hacer algo que debieron haber hecho desde hace tiempo. Nos cuentan que en los próximos días, se habrá de develar el misterio y que los azules saldrán, sin tanto rollo, con su personaje, para hacer valido aquel adagio de que “el que pega primero, pega dos veces”. Y agregan nuestros informantes que la decisión está tomada. Que quien salga de abanderado priista, se las verá nada más y nada menos que con Francisco García Cabeza de Vaca. Así es. Que en las encuestas de mentiritas y en la de de veras, el ganador fue Cabeza y que a Cesar Nava, y al mismísimo presidente, no les quedó más remedio que aceptar la candidatura del reynosense. ¿Será verdad? Lo aseguran. Y hasta se dan el lujo de apostar. Pensándolo bien, Cabeza es el candidato opositor que más le conviene al PRI. Porque es el que más les preocuparía. El que más guerra les daría. El que haría de esta contienda una verdadera lucha. De ser cierta la especie, Cabeza garantiza una elección peleada, antes, durante y después. Echada a andar la maquinaria priista al máximo de su poder y velocidad, probablemente no le alcanzará para ganar. Pero sin duda, seriamos testigos de la más interesante contienda por la gubernatura tamaulipeca de los últimos sexenios.