Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
5 de noviembre, 2009
Basto con que el ayuntamiento decidiera ampliar la carretera al aeropuerto para que de pronto surgiera un grupo de ejidatarios que se dicen dueños de los predios utilizados para ensanchar esa vía y hoy reclaman fuertes indemnizaciones. Además, se quejan de que el ayuntamiento inicio los trabajos –que de hecho están por concluirse—sin antes haberlos indemnizado. Todo este asunto ya está en manos de un juzgado federal que ha autorizado la continuación de la obra. Ahora falta que se decida si los ejidatarios tienen derecho a recibir una indemnización y en el supuesto de que sea así, quién la pagaría. Y es que como se sabe los derechos de vía los cedió la Secretaría de Comunicaciones y Transportes al ayuntamiento. La ampliación de la carretera, que creció de 4 a 8 carriles, divididos en dos cuerpos de 4 carriles cada uno, es una obra más que justificada, por la que diariamente circulan más de 18 mil vehículos, muchos de ellos trailers, tanto cargados como vacíos. La obra no se puede parar porque independientemente de que los ejidatarios de La Concordia comprueben ante un juzgado que son los propietarios, sus derechos no pueden estar por encima de los de una comunidad. Lo curioso es que antes de que se hicieran estos trabajos de ampliación, durante décadas estuvieron esos tramos de tierra sin uso, porque ni para estacionarse eran recomendables y nadie decía nada. Hoy, en todo caso, la autoridad podría cobrarles un impuesto a la plusvalía a los propietarios de predios ubicados junto a la carretera, porque con la ampliación, los inmuebles de ese sector aumentarán de valor. Sin embargo, esa opción nunca la ha contemplado la autoridad. Por su parte, el Presidente Felipe Calderón anuncio ayer el fin de la recesión en México y citó que en el último trimestre del año la economía mexicana creció un 2.7 por ciento, lo que sería la prueba de que la crisis se está superando. Este anuncio nos recuerda a los que el gobierno hacía en las tres últimas décadas del siglo pasado cuando mediante un decreto se pretendía poner fin a un añejo problema. O como lo que pasaba en los tiempos de aquel loco simpático que nos desgobernó seis años que todo lo resolvía mediante declaraciones espectaculares que no estaban acompañadas de la realidad. Como cuando dijo que en 15 minutos resolvía el asunto de Chiapas o que la economía crecería a un ritmo del 7 por ciento cada año. La verdad es que queremos creerle a Calderón, porque esta crisis ha sido peor que todas las que hemos vivido los mexicanos. Por lo pronto hasta panistas como Gustavo Madero advierten que la recuperación de la economía tardara otros dos años. Así pues no hay que ser tan optimista con el anuncio del Presidente como para ir a embarcarnos y comprar bienes, con la confianza de que la economía va a mejorar por decreto y podernos pagar esa casa, ese carro o esa televisión de plasma que tanto nos atrae. En otro tema, para hoy hay junta de cabildo y esperemos que la regidora Griselda Garza deje a un lado los protagonismos, pues en las dos últimas sesiones se ha querido lucir y el regidor Jorge Valdez, que el que más participa, la ha puesto en su lugar y la ha dejado muy mal parada.