Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
12 de agosto, 2009
Si a alguien le urge tener candidatos ya para las elecciones del año próximo es al PAN. Por eso no extraño que tempranamente Francisco Javier Cabeza de Coss filtrase los nombres de ocho prospectos a la gubernatura, aunque bien pudo reducir su lista a dos o tres, que son los que realmente tienen posibilidades de llegar. Los demás son mero relleno. E incluso más que dar una lista de aspirantes, al PAN le conviene tener ya candidato e irlo placeando, porque el panorama que se presenta para el futuro inmediato y mediato no es nada halagador. El PAN viene de una elección federal en la que perdió 8 de 8 posiciones. Además, en la última elección local tampoco no le fue nada mal, al perder las 19 diputaciones locales y quedarse con unas pocas alcaldías, curiosamente todas tienen poca población y manejan recursos muy limitados. Pero además, de que le urge tener candidato a la gubernatura, y de ser posible también a las alcaldías, al PAN también le urge replantear las estrategias de campaña. En la elección de julio pasado, en vez de planear estrategias diferentes para cada uno de los distritos, se optó por marcar la línea nacionalmente y la campaña se cargo a los supuestos triunfos del gobierno federal en materia de seguridad pública. Mientras que el ciudadano común tiene la percepción de que la batalla contra la delincuencia organizada se perdió desde hace varios años, solo el gobierno federal está convencido de que se sigue el camino correcto. El gobierno federal se empeña en convencernos de que en tres años se han detenido a 45 mil presuntos narcotraficantes, pero no dice que en el mismo lapso han surgido nuevos delincuentes en una proporción de 20, 30 50 o más por cada detenido. Así se antoja difícil que se dé una solución en un tiempo razonable. Como la ciudadanía percibe que la batalla la pierde el gobierno, no le otorgó su voto al PAN. Votar por otras opciones fue decirle al gobierno que no están con él, que no está gobernando bien. Grave error cometería el PAN tamaulipeco en centrar su campaña del año próximo en colgarse de los supuestos aciertos del gobierno federal. Mejor haría en concentrase en revisar y analizar la problemática estatal y la de los municipios y ofrecer soluciones para corto plazo. Esa es la única forma de acercarse a la ciudadanía y por eso le conviene destapar sus candidatos e irlos placeando para que la ciudadanía los conozca, pero sobre todo para que los candidatos conozcan a los ciudadanos y los convenzan de que vale la pena darles su voto. A nivel local, el PAN necesita de figuras, ya sea nuevas o recicladas, que empiezan a involucrarse en los asuntos de la ciudad y plantean respuestas a los problemas que nos afectan. Pero para llegar a ese punto, pareciera que los panistas primero deben resolver sus problemas internos y acabar con las camarillas que buscan el poder para beneficio propio. Estos nuevos mesías son los que ya han gozado las miles de de un poder limitado que les ha permitido engordar sus chequeras, aunque no a la altura de su apetito financiero.