Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
11 de agosto, 2009
Parece increíble que en pleno siglo XXI, y en plena crisis, suceda lo que sucederá hoy: el país se paralizará por espacio de varias horas, con motivo del partido de futbol entre los seleccionados de México y Estados Unidos. De las 15.00 a las 17.00 horas millones de mexicanos estarán más interesados en seguir de cerca los incidentes del partido que en poner atención en asuntos más serios que giran en torno a su familia, su trabajo, sus amigos y en otros temas. Hay quienes incluso confunden la competencia deportiva con un acto de civismo, como si el destino de la patria estuviera en juego. En fin, no queda más que esperar a que transcurra la jornada futbolística de hoy. Ya mañana será otro día. Mientras tanto, para este jueves se espera que ahora sí la Suprema Corte de Justicia decida la fecha de las elecciones en Tamaulipas del próximo año, aunque todo apunta de que será el 4 de julio, lo que obligará a adelantar los tiempos electorales y para octubre o noviembre deberán estar instalada la Comisión Estatal Electoral y para fines del año las comisiones municipales y distritales que organizarán las elecciones de alcaldes y diputados. Para fines de este mes también se decidirá la redistritación electoral en el Estado, y el Presidente de la Comisión Estatal Electoral, José Gerardo Carmona, ya adelantó que la nueva distribución se decidirá mediante una operación matemática que consiste en dividir la población total de la entidad, que es de tres millones 24 mil 238 entre los 22 distritos que habrá a partir de enero de 2010. Esto significa un diputado por cada 137 mil 467 habitantes y si en Nuevo Laredo el Inegi acepta una población arriba de los 400 mil habitantes esto daría como resultado que esta ciudad tenga tres diputados de mayoría, más los que se acumulen por la vía plurinominal. Recuérdese que en el trienio 2005-2007, Nuevo Laredo tuvo cuatro diputados, dos de mayoría y dos de representación. Curiosamente los cuatro eran ingenieros: esos cuatro diputados fueron Ramón Garza Barrios, Carlos Montiel Saeb, Everardo Quiroz y Agustín Chapa. Los primeros lograron trascender una vez que terminaron su gestión, en tanto que los dos últimos se perdieron, aunque uno de ellos cambio la grilla por el negocio y logró colarse como proveedor en varios municipios del Estado. En la actual legislatura, Nuevo Laredo también tiene tres diputados: los dos de mayoría del PRI, Imelda Mangin y José Manuel Abdala y la perredista Diana Chavira Martínez que se la ha pasado de conflicto en conflicto y hasta ahora su propuesta más comentada fue la de cambiar la fecha de la celebración de la Revolución Mexicana para que coincidiera con la del aniversario luctuoso de Antonio Guajardo Anzaldúa. Así, pues si se autoriza un nuevo diputado para Nuevo Laredo no tendrá nada de espectacular porque desde hace mucho dejo de ser sorpresa, ahora que habría que analizar que tanto le conviene a la ciudad tener una sobrerepresentación en el Congreso. Por nuestra parte seguimos sosteniendo que es mejor reducir el aparato legislativo y hacerlo más eficiente porque el que haya más legisladores no es sinónimo de eficiencia.