Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
1 de agosto, 2011
Pese a que los números en ocupación hotelera y derrama económica no serán los esperados al término en esta temporada de verano, la playa de Miramar seguirá siendo el producto turístico principal “y el ancla principal de la región”, señaló el director de desarrollo económico y turismo, Jaime Posadas Lara.
Añadió que los efectos de la campaña “Tampico-Miramar” se verán reflejados al cien por ciento en la semana santa del 2012.
El funcionario maderense, sostuvo que el esfuerzo de promoción que han realizado Tampico, Madero y Altamira, para que el área metropolitana y sus atractivos sean mayormente visitados por la gente externa se ha estado cumpliendo al 100%.
Indicó, que la limpieza en el máximo paseo ha sido uno de los aspectos fundamentales, en cuanto a imagen se refiere, pues recordó que el mar y el río Pánuco continúan arrastrando palizada que es depositada en las márgenes, así como el retiro de peces muertos, fenómeno que ocurre todos los años.
“Seguimos retirando palizada, hemos levantado más de 160 toneladas y peces menos de 100 kilos, pues es un fenómeno que se da cuando entran a aguas saladas y lógicamente se mueren”, dijo
Posadas Lara, subrayó que si bien los números, en derrama y ocupación, no son del todo buenos en comparación con otras épocas, recordó que “2009 los números fueron peores que en el 2008, en 2010 fue peor que en el 2009 y en este año lo que estamos haciendo es detener la caída y en este sentido los primeros efectos de la campaña de promoción ya se están viendo, en julio pasado salimos y apenas estamos afectando la toma de decisiones del turismo de México, del Valle de México, Monterrey y su zona metropolitana, los efectos más fuertes los vamos a ver en la próxima semana”, añadió
La ocupación hotelera se sitúa en un 45%, porcentaje que esperan se incremente en las próximas semanas.
Por último y en cuanto a la certificación de Miramar, puntualizó que esperan ampliar la zona hasta 2 kilómetros y llevar algunos parámetros de esa certificación al resto de la playa.
“Esperemos que esa certificación avance en ambos lados, unos 400 metros hacía al norte y 450 hacia el sur, que es la zona hotelera y restaurantera que existe ahí”.