Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
8 de septiembre, 2025
La Confederación Nacional Campesina (CNC) advirtió que México se encuentra frente a una posible crisis alimentaria sin precedentes, pues Estados Unidos, principal proveedor de maíz y granos básicos, podría usar la dependencia alimentaria como un instrumento de presión política.
Raúl García Vallejo, dirigente de la Liga de Comunidades Agrarias en Tamaulipas, lanzó una advertencia directa: “Estados Unidos está utilizando los alimentos como un arma para ponernos de rodillas”. La alerta llega pese a la prórroga de 90 días otorgada para retrasar la aplicación de nuevos aranceles.
El líder campesino sostuvo que el gobierno mexicano ha mostrado debilidad frente a la estrategia de Donald Trump, al tolerar una orden ejecutiva vigente desde el 4 de marzo que impone un 25% adicional de impuestos a todos los productos de origen mexicano que crucen hacia el mercado estadounidense, incluidos los agrícolas.
Recordó que la situación se agrava porque México enfrenta una caída del 57% en la producción de maíz blanco y de otros granos estratégicos, lo que amplía la dependencia de las importaciones norteamericanas. “El campo mexicano enfrenta un doble discurso: mientras Estados Unidos endurece barreras y bloquea jitomate o ganado, su Departamento de Agricultura redobla esfuerzos para vender más aquí”, enfatizó.
De acuerdo con García Vallejo, los nuevos aranceles golpearán directamente la competitividad del campo mexicano, elevarán los costos de producción y, en consecuencia, encarecerán los alimentos para las familias.
El dirigente recordó que, tan solo entre 2023 y 2024, México se convirtió en el principal cliente de la agricultura estadounidense, con compras que alcanzaron 35 millones de toneladas de productos, lo que deja claro —dijo— la magnitud del riesgo si Washington decide usar esa dependencia como un “arma económica”.