Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
20 de julio, 2009
El dirigente del Partido del Trabajo, Martín Sánchez, advirtió que el PT no permitirá que en tiempo de elecciones se acerquen oportunistas que buscan ser anotados en el primer lugar de la planilla de regidores, pensando que las posibilidades de llegar al próximo cabildo son altas. Pero aunque las probabilidades son altas, no hay nada seguro. No al menos en el PT. En el PAN sí lo es; en el PRD se tiene altas posibilidades y aún así se juega un albur. Por ejemplo, en el trienio 1999-2001, con Horacio Garza Garza como alcalde, el PAN tuvo 4 regidores, el PRD 2 y el PARM 1. En las elecciones del 2001, el PRD apuntó en los lugares 1 y 2 a Jorge Valdez y Fernando Pedraza, quien hizo una aportación a la campaña de 10 mil dólares, convencido de que era segura su llegada al próximo cabildo. Sin embargo, la votación del PRD se cayó a menos de 1,300 votos y no tuvo derecho a ninguna posición. Las siete regidurías de minoría fueron para el PAN. Para las elecciones del 2004, el PAN peco de soberbia, y llegó convencido de que nuevamente se llevaría las siete regidurías, pero el PRD postuló a Héctor Peña Saldaña quien obtuvo el segundo lugar y le dio cuatro regidurías al PRD y el PAN redujo sus lugares a tres. En esa misma elección, Fernando Pedraza participo como candidato a la alcaldía bajo las siglas del PT y en el primer lugar de la planilla registro a su hijo Fernando. Estaba convencido de que obtendría votos suficientes no para ganar, pero sí para que su hijo llegase al cabildo por la vía plurinominal. Sin embargo, la suerte le fue negativa, a pesar del gran esfuerzo que realizo durante la campaña y su hijo no pudo llegar. En la última elección, la del 2007, el Partido Alternativa Social Demócrata y Campesina registró en el primer lugar de la planilla a Víctor Martell Alvarado que se quedó a 28 votos de acceder al cabildo. Aunque ciertamente en el PT ir en el primer lugar de la planilla no asegura llegar al próximo cabildo, en lo que si tiene razón Martín Sánchez es en que tanto su partido como el PRD y el PAN deben cerrarle el paso a oportunistas y deben dejar los primeros tres lugares de la planilla para militantes auténticos, con varios años de participar en las campañas, no solo votando sino incluso con aportaciones en dinero o en especie tanto en tiempo de elecciones como fuera de estos, que tengan una asistencia regular a las reuniones del partido, tanto locales como regionales o nacionales. Si en la oposición, la pelea es por los primeros lugares, el PRI el problema que enfrentan sectores y organizaciones es que se les exige el 50 por ciento de las posiciones del cabildo para mujeres, lo que obliga a sacrificar a personajes con méritos partidistas, para poder cumplir con la cuota que exige el partido. En las elecciones del 2004 y en las 2007, los sectores han sido afectados al tener que cumplir con estas cuotas y se ha dado el caso de que en las ternas han colocado en el tercer lugar a mujeres, en calidad de relleno, pero al final la suerte las ha favorecido. Después del 2004 y del 2007, más de un líder sectorial ha lamentado haber propuesto a tan o cual regidora porque han desempeñado un papel gris durante su desempeño.