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Los Chavira siguen en la mira

Raúl HERNANDEZ

13 de julio, 2009

Pasadas las elecciones, el líder estatal del PRD, Jorge Mario Sosa Pohl desempolvo el tema de los hermanos Chavira e insistió en que será la Comisión de Garantías y Vigilancia la que determine las sanciones a que se harán acreedores. Los hermanos Chavira enfrentan una serie de cargos que van desde no estar al corriente en el pago de sus cuotas como militantes, lanzar denuestos contra los dirigentes y hasta falsificar boletas en la elección interna del 16 de marzo de 2008. Francisco Chavira también enfrenta un juicio penal como presunto responsable de haber ordenado el ataque a una camioneta cuyos daños ascienden a más de 180 mil pesos, más lo que se acumule con el paso del tiempo. A la dirigencia le interesa que tanto la diputada Diana como su hermano Francisco sean expulsados del PRD pues están convencidos de que estos transitan por un camino sin retorno y que hacen menos daño estando afuera que adentro. Por otro lado, ya están en puerta las vacaciones en la burocracia estatal y municipal. Habrá un receso de 10 días hábiles, a partir del 20 de julio para regresar a trabajar el 3 de agosto. Los más contentos con este receso son los regidores que de por sí trabajan muy poco --eso de que trabajan, es un decir-- y ahora tendrán un pretexto formal para justificar sus ausencias en la presidencia municipal. Esta semana habrá junta de cabildo, pero ya se sabe que una gran mayoría de los regidores asisten a las mismas en calidad de ornato, pues nunca participan en las discusiones que se generan. Hay quienes incluso quisieran que el pase de lista se hiciera de manera electrónica pues de esa manera no se tendrán que molestar en contestar en voz alta a la hora en que el Secretario del Ayuntamiento pronuncia sus nombres. De los pocos que si toman parte activa en las sesiones, y diríase que es obligatorio que lo hagan, son los dos Jorges, Valdez Vargas del PRD y Ramírez Rubio, secundados por Rogelio Soto y José Guadalupe Bautista Montoya. Por cierto que en la junta de cabildo, el alcalde Ramón Garza Barrios oficializará la renuncia de Alfonso Olvera a la Dirección de Seguridad Ciudadana, en lo que constituye la crónica de una salida muy anunciada, básicamente desde los primeros meses del año pasado. Y es que el rubro de seguridad pública es una papa caliente en todo el país y Nuevo Laredo no es la excepción. Si en el pasado sobraban los que querían asumir cargos de dirección, hoy se reducen los nombres de los que están interesados y que realmente están capacitados para ello. Olvera tenía varios meses de estar insistiendo en que se le aceptara su renuncia y finalmente se le acepto. En su lugar se encuentra provisionalmente Antonio Aguilar Candelaria, quien se desempeñaba como Director de la Academia de Seguridad Pública. Por cierto, que para la sesión de cabildo, algunos ediles preparan un extrañamiento para Verónica Bolado, una funcionaria de cuarto nivel dentro de la Oficina Ejecutiva de la Presidencia, pero la cual la traen atravesada pues la acusan de ser orgullosa y pedante. No es la primera vez que intentan hacerle un llamado de atención y como no lo han logrado la mujer se crece y se siente una chica super poderosa. Y es que es de esas personas que creen que la suerte es eterna, pasando por alto sus propias historias.
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