Luis Alonso Vásquez
Dirección General
Martha Isabel Alvarado
Sub Dirección General
7 de marzo, 2010
Domingo movido. El PRI da a conocer la convocatoria para la elección de los aspirantes a diputados locales, y de inmediato vienen los “pronunciamientos”. Y lo que sucedió en Matamoros, debe llamar poderosamente la atención. Las ausencias de Alfonso Sánchez y de Erick Silva, en el acto destape, efectuado al mediodía de ayer, dieron lugar a los mas variados comentarios. Es indudable que por el más elemental gesto de buena política, debieron estar ahí, tanto el pre candidato a la alcaldía matamorense, como el presidente municipal, que suponemos, estaba en su día libre. Su no asistencia levanto una ola de comentarios, siendo el mas socorrido, el que “no estuvieron de acuerdo con la designación de Carlos Valenzuela”. Lamentablemente no se puede interpretar de otra manera. En los destapes de Tampico y Reynosa, por ejemplo, estuvieron presentes , tanto Oscar Pérez Inguanzo, como Oscar Luebert, alcaldes, y Miguel Manzur y Everardo Villarreal, pre candidatos a alcaldes. Igual en Nuevo Laredo, con Ramón Garza Barrios y Benjamin Galván. Sabido es que en estas tierras se daba por descontado que el joven Mario Tapia iba ser uno de los elegidos. Por eso, desde la tarde del sábado, cuando se comenzó a mencionar que el que iba en la lista era Valenzuela, se soltaron los comentarios en el sentido de que algo había sucedido de última hora. El propietario de “Bigos”, ciertamente, también es gente de Erick Silva, pero nadie podría negar que su apoyo incondicional era para Tapia. Aun mas, se decía que aquel pecado de las despensas, hace algunos anos, había sido la tumba política de Carlos Valenzuela. Ya vimos que no fue así. Algo sucedió que hizo cambiar el rumbo de las negociaciones. Entonces, el argumento de que “Poncho y Erick andaban fuera de la ciudad”, da mucho a pensar. Aun y cuando fuera cierto, sus ausencias dijeron otra cosa. Y si fuera verdadero que ambos políticos no están de acuerdo con la inclusión de Valenzuela, estamos ante un muy mal mensaje, pues flaco favor le al PRI tener divisiones hacia su interior. En el caso de Daniel Sampayo, el otro destapado, no hubo sorpresa. Ya se esperaba. Y aunque su designación es polémica, era un hecho cantado. El otro distrito en Matamoros, el PRI va en coalición con el PANAL, y se asegura que una maestra, de apellido Arizoca, es la buena. Esperamos conocerla pronto. En cambio, en Reynosa, los destapes se dieron en forma tersa. Carlos Solís Gómez, Amelia Vitales y Reynaldo Garza, eran los esperados, aunque no se descartaba de ultima hora a Esiquio Resendez. Otro foco de inconformidad para el PRI, se da en Altamira, en donde se esperaba ver enlistado al controvertido Genaro de la Portilla. No salio. Estaremos a la espera de una reacción muy a su manera. Días difíciles el esperan al PRI estatal y a su dirigencia. A los brotes de malestar ya existentes, se suman otros; Sergio Guajardo Maldonado, líder estatal de la CNC madruga a la propia convocatoria. En seis municipios finalmente no habrá consulta a la base y se sigue negociando un candidato de unidad. En los otros 23, hay 76 aspirantes. Demasiados. Un verdadero lío.