La lista de Matamoros

Martín SIFUENTES

25 de agosto, 2009

Me aclaran que en la sucesión municipal para Matamoros, las cosas se resolverán entre el más placeado y movido, el diputado Alfonso Sánchez, y el actual director de la oficina de largo nombre llamada Agencia Ambiental para el Desarrollo Sustentable de Tamaulipas, Salvador Treviño, a quien incluso colocan con mayores simpatías en el corazón del gran elector. Ante esto, la muy grande lista de aspirantes a la alcaldía, se pasa a la de los que por lo menos, se conformarían con una diputación local. Recuérdese que en la próxima legislatura local, por aquel tema de la redistritación, en Matamoros se disputarán tres distritos electorales, de modo que por lo menos estarán seguros tres curules para matamorenses, que podrían ser mas, por la vía plurinominal. A saber, desde las oficinas de la sexta, se ilusionan con la posibilidad de ser tomados en cuenta, Héctor Silva Santos, hermano gemelo del alcalde; Carlos Valenzuela, secretario de desarrollo social, sobre quien pesa aquel vergonzoso episodio de las despensas; también quiere Raúl Cesar González, secretario del ayuntamiento; lo desea el sindico Juan Carlos Cisneros, y por supuesto, el secretario más influyente en las colonias, Mario Tapia. Desde el PRI municipal, con un buen desempeño, pero más que nada con la amistad personal de Ricardo Gamundi, Abelardo Martínez Escamilla espera recibir la oportunidad. En la Fundación Colosio, y desarrollando una discreta, pero intensa actividad, está el abogado Pedro Luis Coronado, hombre bien intencionado con poca experiencia política, pero al fin y al cabo, cara nueva, y eso, podría serle favorable. Con la vela prendida y apoyado en ser un hombre cercano al ex secretario estatal de salud, Víctor García Fuentes, también está en espera de recibir el llamado que cambiaria su vida. Hay quien dice que de repente, Jesús de la Garza Díaz del Guante podría aparecer. Que se la deben desde hace tiempo, y que incluso un ex gobernador lo estaría promoviendo. Si no se pudiera la alcaldía, no le haría el feo a una diputación, que por cierto, ya tuvo por un tiempo. Y me dicen que en esta lista no se debe dejar fuera a Pablo Zarate, operador de peso completo y enormes simpatías entre la prensa. Sin embargo, trae un fierro muy marcado en la frente, que podría no serle favorable. Y por aquello de la equidad de género, ¿Dónde están las mujeres en esta lista? Pues resulta que la única con posibilidades reales de ser candidata propietaria en Matamoros y en muchas partes del estado, es la maestra Guadalupe Flores. Y no hay más. Dándole una rápida revisada a los cuadros femeninos priistas en la entidad, nos damos cuenta que lo que ocurre en Matamoros, es más o menos igual a lo que pasa en otras ciudades grandes. No hay mucha tela de donde cortar en lo que se refiere a las damas. En Matamoros quisieran ser tomadas en cuenta, aunque se ve muy difícil, las regidoras Sandra Verónica García; Lolis de la Garza y Mary Carmen Domínguez. También, la secretaria general del PRI municipal, Rocío Escobar, la líder de mujeres Alejandrina Martínez, y hasta Yesenia García, del Frente Juvenil. Son cuadros débiles. Por lo menos, irá alguna de suplente para cumplir con la equidad. Hoy en día los priistas de Matamoros están más que confiados, sabedores de que cuando quieren ganar por paliza lo hacen, y que cuando quieren ganar “por poquito”, también lo logran. ¿Pero que tal si se les parece un buen gallo panista a la alcaldía, y arrastra a los candidatos a diputados? Aguas. El PAN en Matamoros, dicen, está preparando una sorpresa. Y no se llama Carlos García.