¡Ah... si Rodolfo no se hubiera ido!

Martha Isabel Alvarado

13 de febrero, 2011

.-Priístas recuerdan hoy a RT
.-Un gran Secretario de Salud 
.-Hablan sus buenas acciones 
.-A honrar legado: Don Egidio 
 
En el Día del Amor y la Amistad que se celebra hoy, los priistas de Tamaulipas honrarán con diversas actividades la memoria del doctor RODOLFO TORRE CANTU, que este día cumpliría 47 años de edad.
 
Como es de sobra conocido, y de sobra lamentado, Rodolfo fue privado de la vida siendo candidato del PRI a gobernador de Tamaulipas.
 
Desgracia que por cierto, no impidió que Rodolfo ganara en las urnas los comicios del 4 de julio del 2010…toda vez que la alta jerarquía del PRI y el entonces Jefe Político del Estado, determinaron no posponer la elección.
 
Son muchos los afectos que a lo largo y ancho del territorio tamaulipeco supo sembrar Rodolfo durante su ejercicio en el sector público, sobre todo, entre los más necesitados. 
 
Abundan testimonios de gratitud derivados de su sensibilidad y generosidad como Médico.
 
Fueron muchas las ocasiones en que tocamos la puerta de la Secretaria de Salud para gestionar ayuda a terceros, y su Titular, sin excepción, atendió siempre el llamado, y lo hizo además con calidez.
 
Ese era Rodolfo.
 
Lo más encomiable de la respuesta dada por el doctor Torre a este tipo de casos, es que no solo apoyaba la gestoría turnándola a determinado Hospital, aparte le daba seguimiento.
 
Bien que recordamos el caso de una compañera reportera del municipio de San Fernando, cuya Madre requirió de varias cirugías a consecuencia de un padecimiento de Cáncer, para lo cual fue traída a una Clínica Particular de Reynosa.
 
Las apreciables compañeras de la Red Estatal de Mujeres Periodistas con sede en Victoria a través de ROSY RODRIGUEZ, pidieron a esta que escribe, apoyar en lo que fuera posible.
 
Obvio que la Cuenta en la Clínica Particular en la Clínica de Reynosa, se disparó exorbitantemente.
 
De modo que nuestra compañera de San Fernando veía con angustia que la Autora de sus Días podía fallecer en cualquier momento por su grave estado de salud…y ella podía ‘infartarse’ en por los saldos que le llegaban de la Caja.
 
Poco pudimos hacer de nuestro propio caudal, aunque el esfuerzo se hizo, para liquidar aquella Cuenta de hospital y trasladar a la paciente al Hospital General a fin de que concluyera su tratamiento.
 
Sin embargo, toda esta angustia se disipó cuando Rodolfo y su buen corazón, entraron al quite. Nuestra compañera y su Madre retornaron a San Fernando, agradecidísimas, de por vida, con su bienhechor.
 
Y no conforme, Rodolfo ordenó al colaborador de todas sus confianzas, ROBERTO HERNANDEZ BAEZ, llamar con cierta frecuencia para informarse del estado de salud de la paciente.
 
El Doctor Torre jamás dejaba las cosas a medias…excepto su deseo de gobernar a Tamaulipas…porque ya no le alcanzó la vida.
 
La humildad que caracterizaba a Rodolfo, como servidor público y como político, no la tiene cualquiera:
 
Durante un almuerzo que el entonces candidato del PRI a gobernador tuvo en el Comité Campesino de Reynosa, esto el 14 de junio del 2010, el padre del menor GIOVANNI ESCOBEDO, aquel al que un perro rottweiler le destrozó una de sus piernas, se acercó para externar palabras de gratitud al galeno, por la atención recibida en momentos de gran angustia…y al escucharlo, los ojos de Rodolfo se humedecieron.
 
Otra reunión que mucho se recuerda en Reynosa, es la que el doctor Torre sostuvo en campaña, con el Comité Ejecutivo de la Federación de Trabajadores de Reynosa y Ejecutivos de RAMAC, el 21 de mayo del 2010.
 
En la cual ofreció dotar a cada Parque Industrial con una Unidad de bomberos, guarderías, y prometió crear en esta ciudad un Centro Oncológico. “Es un compromiso, me están grabando, tengo palabra y voy a cumplirles”, manifestó textual.
 
Recientemente, en breve plática que sostuvimos con el también Doctor, Don EGIDIO TORRE LOPEZ, nos hizo saber de su gran compromiso por honrar el legado de su hijo Rodolfo, atendiendo las demandas de Salud de los que menos tienen y más necesitan.
 
CONTRAFUEGO: Qué hueco más difícil de llenar.
Hasta la próxima.