24 de septiembre, 2014
El PRI tomo una bocanada de aire fresco en los últimos días y da muestras de que no solo es un partido vivo, sino que está listo para dar la batalla en las elecciones del 2015, con toda la intención de recuperar primero el Distrito I y luego la alcaldía.
El sábado 20, el diputado Ramiro Ramos Salinas reunió a la mayor parte de la clase política del PRI, incluidos tres ex alcaldes y 14 diputados locales del MC, Panal, Verde, PRI y PAN.
El lunes 22, el dirigente del PRI, Jesús Valdez Zermeño, hizo declaraciones en el sentido de que la actual administración no ha hecho nada excepcional, además de que goza de la fortaleza económica que han construido las administraciones priistas y que hoy le permiten ejercer un presupuesto de dos mil 500 millones de pesos.
El martes 23, se vivió una nueva jornada al interior de la bancada de regidores del PRI. En los últimos días, el grupo de siete regidores se fraccionó y se pretendió remover de la coordinación a Arnulfo Tejada Lara, pero terminaron ratificándolo, con el compromiso de asumir una postura más crítica en el cabildo.
No se busca oponerse por sistema a todo lo que propongan los del PAN, pero sí que se genere más debate. Los regidores del PRI saben que los del PAN los van a mayoritear, pero si son inteligentes podrán exhibir las flaquezas de los azules.
El miércoles 24, 25 funcionarios estatales, encabezados por Viviano Vázquez, delegado de la Secretaría de Desarrollo Social, iniciaron el reparto de más de 23 mil despensas.
En este programa participan el delegado de Itavu, Martín Guerrero; los titulares de las Oficialías del Registro Civil, como Onofre Hernández Madrigal: el Jefe de la Jurisdicción Sanitaria Número 5, Jaime Emilio Gutiérrez; el titular de Educación, Aurelio Uvalle; la Jefa de la Oficina Fiscal, Imelda Mangín Torre; el delegado del Transporte, Fernando Medina, y muchos más.
El programa tiene el doble objetivo de acelerar la entrega de las despenas y permitir el contacto entre los funcionarios y los ciudadanos beneficiados.
Todas estas acciones emprendidas por líderes y funcionarios del PRI, son la señal de que las elecciones del 1 de junio de 2015 no serán como un pic nic, como ingenuamente lo creen algunos personajes del panismo que piensan que Nuevo Laredo es de ellos, incluidos los recursos públicos.
Al mismo tiempo que se realizan estas actividades, se terminan de reestructurar los sectores y organizaciones, así como la estructura territorial, para garantizar que los nuevos liderazgos en las colonias traigan bien puesta la camiseta del PRI.
El PRI tendrá que enfrentarse al hecho de que el PAN va a aprovechar las arcas públicas para comprar conciencias y adeptos, aunque confía que al final prevalezca la conseja popular que recomienda aceptar lo los partidos den, pero votar con libertad.