Unos... sin afiliación

Raúl HERNANDEZ

5 de agosto, 2014

Carlos Canturosas ya es militante activo del PAN. Su nombre aparece en  el padrón nacional de militantes del Partido Acción Nacional y fue dado de alta el 24 de marzo del presente año. Sin embargo,  sus datos, así como de otros 219 nuevos militantes,  fueron incorporados a la página electrónica  del PAN, hace apenas algunos días.

Canturosas  había solicitado  ser admitido como miembro adherente del PAN  en diciembre de 2012, semanas antes de que emprendiera el camino en pos de la candidatura a la presidencia  municipal.

Junto con Canturosas,  fueron admitidos como militantes otros 219 elementos con lo que el padrón panista pasó de 202 a 423.

Entre los nuevos afiliados figuran los diputados Salvador Rosas Quintanilla y Laura Zarate Quesada; el  actual Secretario de Obras Públicas, Carlos Germán de Anda; los síndicos Jorge González Fischer y Antonio Martínez Santoyo.

Los regidores Heriberto Cantú Deándar, Mónica Salinas Canales, Martiza Zarate Flores, Luis Talamás Cárdenas, Luis Cavazos Cárdenas, Ireri Calderón Cortés, Irma Richer de León, Miguel Ángel Vaughan.

Además del alcalde también se dieron de alta sus tres hermanas, Carmen Lilia, Cynthia Edith y María Claudette.

Bruno Álvarez Sánchez también se dio de alta, junto con sus hermanos Roberto, Gloria Verónica y María Virginia.

Causa extrañeza que no se hayan afiliado al PAN, personajes como Enrique Reséndez Covarrubias, Rubén Bazán Ancira, Hilario Molina García y Luis Lauro García Treviño,  todo ellos priistas en alguna etapa de sus vidas, y después convertidos en convencidos canturosistas.

La gran mayoría de los nuevos afiliados tienen  el sello del alcalde. Más que panistas son canturosistas. Algunos como Fernando Torres y Ricardo Canales, ambos funcionarios municipales, abiertamente lo dicen a quien  cuestiona su cercanía con el PAN. Están con Canturosas y lo  seguirán a dónde este vaya. Claro, habrá quien recuerde al Pedro de los evangelios, pero esa es otra historia.

Con la nueva membrecía, se reducen las posibilidades de quienes pretenden ser candidatos a la  diputación  federal,  pero jugándose por la libre,  pensando que la  elección la decidirán  los  militantes. Nunca previeron que el PAN pudiese crecer  al más del 100 por ciento, al menos en el papel y que los nuevos militantes se sientan comprometidos  no con el partido, sino con quien  los invito, expresa o tácitamente.

Por supuesto, en Nuevo Laredo hay un personaje que para ser candidato no requiere el visto bueno de los militantes. Le basta con  que lo palomeen del Comité Ejecutivo Nacional, como lo ha hecho en otras ocasiones. Ese es el diputado Salvador Rosas  que se maneja de manera independiente y casi a gritos dice que él no atiende órdenes ni presiones de nadie.

Salvo el caso de Glafiro Salinas Mendiola, en los últimos años los candidatos  del PAN han sido decididos por el Comité Ejecutivo Nacional. La democracia interna  ha sido letra muerta y es una lástima, porque necesitamos más partidos donde las decisiones las tomen los militantes, aunque  eso  implique la posibilidad de  equivocarse.