10 de febrero, 2014
El alcalde Carlos Canturosas anunció la segunda edición del programa Vive Nuevo Laredo, para el 22 y 23 de febrero, coincidiendo con las fiestas de George Washington que se realizan en Laredo, Texas.
Habrá cierre de las primeras 5 cuadras de la avenida Guerrero, con la participación de 20 restaurantes ofertando sus productos, juegos mecánicos, cata de tequila y varios escenarios donde participarán grupos de rock, mariachi, bailables regionales etc.
Esta es la segunda edición en casi 5 meses de gobierno panista. Que bueno que se realizan este tipo de eventos, que debieran hacerse cada dos semanas, para atraer visitantes, pero también para que las familias neolaredenses vuelvan a salir a las calles.
Nuevo Laredo necesita de muchos eventos recreativos, culturales y sociales, a los que puedan asistir los papás, los hijos pequeños y los grandes, que las familias puedan convivir.
En otro tema, la exposición de pinturas del maestro Arnulfo Alonso Lima, que estaba programada para inaugurarse este martes 11, fue cancelada en el último momento y por tiempo indefinido.
Lo más irreal es que la exposición se canceló porque no se recibió pintura para uniformar las paredes de la galería de exposiciones de la Estación Palabra, donde los cuadros se estarían exhibiendo durante 49 días.
Por falta de pintura, y otras razones, se pretendía atrasar la muestra y el maestro Alonso Lima optó por cancelarla. Lo curioso es que esta exposición ha sido montada en otras ciudades como Durango, Victoria y San Luis y no aquí en el terruño de Alonso Lima.
Ni modo, ya habrá otra ocasión.
Por otra parte, faltan unos pocos días para que las autoridades de los dos Laredos participen en la ceremonia del abrazo a mitad del puente II, evento que en los últimos lustros se ha convertido en un acto meramente protocolario, muy lejano de los lazos de fraternidad que en un principio motivaron la celebración.
Con todo y que los neoleredenses tenemos familiares, amigos y conocidos en Laredo y a los laredenses les sucede lo mismo, la realidad es cuando se trata de temas oficiales, esta fraternidad no se da. Nuestros vecinos se acaban de llevar la línea Interjet, pusieron aduana en el aeropuerto, trabajan de la mano con Nuevo León para tener un tren bala y a Nuevo Laredo no se le toma parecer.
Claro, todos estos distanciamientos se dan porque del lado mexicano se no se hace lo suficiente para mejorar estas relaciones de amistad. ¿Se acuerda cuando jugaba el equipo de beisbol Tecolotes y cada que se jugaba en casa, había dos o tres juegos en Nuevo Laredo y uno en Laredo? Ahí si se sentía la fraternidad, ni quien dijera nada, además de que eran tiempos en que había mucho contacto entre ambos gobiernos.
El gobierno panista tiene mucho que hacer para que se recompongan las relaciones entre las dos Laredos y que haya una fraternidad de a de veras y que ambas ciudades logren acuerdos que beneficien a las dos.