28 de febrero, 2012
El jefe de la jurisdicción sanitaria número 5, doctor Jaime Emilio Gutiérrez Serrano, tiene previsto ofrecer una conferencia de prensa para fijar su postura en torno al caso del secretario general de la Fstse, Benjamín García Marín.
En días pasados, un matutino publico declaraciones atribuidas a Gutiérrez Serrano en el que este aseguraba que García Marín cobró un año sin trabajar en la Secretaría de Salud, donde tiene una plaza en el área jurídica, y sin tener un permiso para ausentarse del trabajo.
Las declaraciones presuntamente no las habría hecho Gutiérrez Serrano sino que le fueron atribuidas y ahora presentará copia de los oficios en los que García Marín pide permiso sin goce de sueldo y él, como titular de la Jurisdicción Sanitaria, se los concede.
No hay, pues, ninguna ilegalidad y lo que ocurre es una lucha de poder entre el secretario general del Sindicato de Trabajadores del Sector Salud, César Mendoza de León y Benjamín García Marín. El primero está enojado porque el segundo traía otro candidato durante el proceso de elección en el sindicato y se ha convertido en un cadillo molesto para el actual dirigente de la Fstse.
Por otra parte, ayer se registro el lamentable deceso del abogado Héctor García Treviño, conocido como El Chato García.
A finales de los setentas y principios de los ochentas, del siglo pasado, El Chato García fue director del penal de La Loma, cuando el control de los reclusorios lo ejercían las autoridades. Durante su permanencia al frente del hoy desaparecido penal, lo mismo tenía contentos a reos, que custodios y reos y El Chato hacía tan bien su trabajo que más tarde se hizo cargo de la dirección del penal de las Islas Marías.
También estuvo a cargo de la gerencia de la tienda del Issste, cuando estas estaban centradas a atender a los burócratas federales.
El Chato García era una excelente persona. Su tío fue Manuel García Ortega, El Borrado, quien durante muchos años se desempeño como secretario general de la Sección 2 del Sindicato Nacional de Alijadores, cuando este era un gremio pesado y a de veras. El Borrado García en su momento fue parte del ala cetemista que pugnaba por un sindicalismo moderno en el que se privilegiara el dialogo y no la confrontación.
Hace algunos años. El Chato García sufrió un infarto, que junto con la diabetes, se convirtieron en un serio problema de salud, pero él siguió esforzándose por salir adelante. Hoy descansa en paz.
En otro tema, Martín Sánchez Mendoza, dirigente del Partido del Trabajo, señaló que quienes resulten abanderados electorales de la izquierda en Tamaulipas y Nuevo Laredo, deben ir a hace campaña y no colgarse solo de la fama de Andrés Manuel López Obrador.
Y tiene mucha razón, salvo Carlos Cantú Rosas y Héctor Peña Saldaña, los demás candidatos de la izquierda aquí en Nuevo Laredo, no han hecho campaña o la han hecho muy aguada, confiando en que la imagen primero de Cuauhtémoc Cárdenas y luego de López Obrador, sería suficiente para hacerlos ganar.
Es cierto que a diferencia del PRI y el PAN, el PRD no tiene dinero para hacer campañas costosas, pero caminar calles y pararse en los cruceros no cuesta, como siempre lo hizo Cantú Rosas.