24 de diciembre, 2014
El tiempo se agota para los aspirantes a ser candidatos independientes.
Este viernes 26 vence el plazo para presentar la solicitud de registro y el día 29, los Consejos Distritales sesionaran para determinar cuáles proceden. Los que reciban la aprobación, tendrán que pasar a la siguiente etapa, que es la recolección de más de 6 mil 200 firmas de apoyo de ciudadanos, incluyendo la huella digital.
Es poco probable que en el Distrito 1 se registren aspirantes. Los personajes que hasta hace poco habían externado su interés en participar, nunca se ocuparon en cumplir los requisitos, y eso que se les dio más de mes, pues el plazo empezó a correr el 21 de noviembre.
Hubo alguno que empezó a reunir los requisitos, como luego se dice, al cuarto para las doce, y se encontró con que la Delegación de la Secretaría de Economía se fue de vacaciones desde el viernes pasado y necesitaba hacer presencia en esa dependencia para dar de alta la asociación civil, que se exige a los aspirantes a ser candidatos independientes. Es pasa cuando se deja todo para el último momento.
Los requisitos para los independientes son complicados, nadie lo niega, pero son los que contempla la ley y en consecuencia se tienen que cumplir.
En el futuro la ley se tendrá que flexibilizar, para que no sea letra muerta y para que sean los ciudadanos, y no los partidos, los que decidan el destino democrático del país. Pero para eso tendrán que pasar algunos años más y recordamos como en el 2006, Jorge Castañada en su derecho a ser candidato presidencial independiente, recurrió a los tribunales internacionales y no encontró respaldo, pues se le dijo que era un asunto competencia de las autoridades electorales en México.
Antes de eso, en 1976, el Partido Comunista participó en las elecciones presidenciales sin tener registro y obtuvo cerca de un millón de votos, que no fueron reconocidos.
Hemos avanzado en los últimos años en materia de candidatos independientes, pero persisten los rezagos y quién sabe cuántos años o décadas, tendrá que pasar para que participar bajo este esquema sea relativamente fácil.
Mientras tanto, en Nuevo Laredo no habrá alianzas entre los partidos en el elección del 2015. No habrá alianzas, al menos legales, pues de facto es probable que sí se den.
El PAN tiene asegurada una alianza de facto con el PRD, similar a la del 2013, en la que se postuló un candidato, pero de mera simulación y a la militancia se le dio órdenes de votar por el PAN.
El modelo se va a repetir en el 2015, no tenemos la menor duda.
El PAN también busca una alianza de facto con una fracción de Morena, pero ahí el asunto es más complicado, pues Morena no tiene registro definitivo y necesita de votos para lograrlo, por lo que nos es recomendable que la militancia acate estas órdenes.
Morena esta fraccionado en dos grupos. El mayoritario lo tienen Héctor Ponce y Oscar Alarcón, en tanto que el minoritario lo controla Estuardo Alvarez, aliado del PAN.