Descanse en paz Heberto V.

Raúl HERNANDEZ

5 de diciembre, 2013

Falleció el ex alcalde Heberto Villarreal García, quien estuvo al frente del gobierno municipal durante la administración 1987-1989.

Villarreal, de 83 años, era originario del Carmen, Nuevo León, pero  desde muy joven llegó a Nuevo Laredo y durante cuatro décadas trabajo en la planta local de la Coca Cola.

El ex alcalde  padecía  una serie de enfermedades: diabetes, alta presión, mala circulación,  males cardíacos. Murió en la intimidad de su hogar.

Antes de ser alcalde, Heberto fue presidente del Comité Municipal del PRI, a invitación  del entonces secretario general de la CTM, Pedro Pérez Ibarra, que entonces tenía el control político de Nuevo Laredo y decidía desde alcaldes, diputados, regidores, funcionarios municipales, estatales y federales.

Tres o cuatro años antes de que fuese alcalde, Heberto facilitaba el comedor de la Coca Cola para que se reuniera ahí la cúpula de la CTM, encabezada por Pérez Ibarra.

La  llegada de Heberto a la candidatura fue traumática, pues la CNOP se negó a que le quitarán una regiduría, pues le ofrecían seis y quería siete y terminó por no participar en la campaña. Pérez Ibarra resolvió el asunto habilitando  como  cenopistas,  a personajes que por su profesión  cabían en el sector, aunque la realidad es que no estaban activos en la CNOP.

El paso de Heberto por la alcaldía tampoco fue fácil. Con los reporteros los enfrentamientos eran frecuentes y cada vez que se molestaba con alguno de ellos,  visitaba a los dueños de los periódicos  --entonces ni la televisión ni la radio tenían noticieros—para  pedirles que  quitaran de la fuente a tal reportero, o incluso que lo despidieran, pero nadie le hizo caso.

Casi al final de su mandato, un grupo de regidores  pretendió desconocerlo como alcalde, con el argumento de que tomaba decisiones sin consultar al cabildo.

Después de que dejó la presidencia, Heberto se reintegro a la iniciativa privada como presidente de la delegación local de la Cámara de la Industria de la Transformación. Ya no volvió a figurar en política y aprovechaba cualquier ocasión para criticar al PRI y su visión de la democracia, lo que molestaba a los priistas, pues Heberto fue una imposición de Pérez Ibarra, primero en el PRI y después en la alcaldía, pero él actuaba como si fuese el resultado de una consulta popular.

Como sus críticas al PRI eran frecuentes e incluso en 1995 llegó a decir que el partido perdería las elecciones, hubo el intento de expulsarlo del las  filas del Revolucionario Institucional, pero al final la idea se desecho, convencidos de que expulsarlo era darle una importancia que no tenía.

Otros partidos, como el PRD,  buscaron afiliarlo, pero él nunca acepto esas invitaciones.

En la última campaña electoral asistió a varios eventos en apoyo al candidato del PRI, Carlos Montiel Saeb.

Hoy Heberto descansa en paz.